Ir al contenido principal

International Trade Platform and the Digital Agenda




A regional or national trade platform administered by a government for international trade is a single point of access for businesses to obtain information and services related to international trade. These platforms typically offer a variety of features, including:

  • Trade data and statistics: Users can access information on trade flows, tariffs, and other trade-related data.
  • Regulatory information: Users can learn about the import and export regulations of different countries.
  • Online trade services: Users can submit trade documents, obtain permits, and make payments electronically.
  • Trade matchmaking tools: Users can connect with buyers and sellers in other countries.
  • Support services: Users can access training, technical assistance, and other support services to help them with their international trade activities.

Governments administer these platforms to facilitate international trade and reduce the costs and complexities for businesses. By providing a single point of access for information and services, governments can help businesses to save time and money, and to comply with trade regulations.

Here are some examples of regional and national trade platforms administered by governments:

  • Trade Single Window (TSW): A TSW is a single electronic platform that allows businesses to submit all of their trade documents to a single government agency. The agency then forwards the documents to the relevant government agencies for processing. TSWs have been implemented in many countries around the world, including Singapore, Malaysia, and Thailand.
  • National Trade Portals: National trade portals provide businesses with a single point of access to information and services related to international trade. These portals typically offer a variety of features, including trade data and statistics, regulatory information, and online trade services. Examples of national trade portals include the U.S. Export Assistance Center and the Canadian Trade Commissioner Service.
  • Regional Trade Platforms: Regional trade platforms are similar to national trade portals, but they serve multiple countries. These platforms can help to facilitate trade between countries in the region by providing a common platform for businesses to access information and services. Examples of regional trade platforms include the ASEAN Trade Repository and the MERCOSUR Trade Information System.

Governments are increasingly investing in trade platforms to support international trade. These platforms can play a significant role in helping businesses to access new markets and to grow their exports.

Benefits of using a regional or national trade platform

There are a number of benefits to using a regional or national trade platform, including:

  • Reduced costs and complexity: Trade platforms can help businesses to save time and money by providing a single point of access for information and services. This can reduce the need to interact with multiple government agencies, which can be costly and time-consuming.
  • Improved compliance: Trade platforms can help businesses to comply with trade regulations by providing them with access to the latest information on regulations and by streamlining the trade process.
  • Increased efficiency: Trade platforms can help businesses to operate more efficiently by automating tasks such as document submission and payment processing.
  • Improved market access: Trade platforms can help businesses to access new markets by providing them with information on trade opportunities and by connecting them with buyers and sellers in other countries.

Overall, trade platforms can offer a number of benefits to businesses of all sizes. They can help businesses to reduce costs, improve compliance, operate more efficiently, and access new markets.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Economía Circular: desafíos para Centroamérica

    El Acuerdo de París es un acuerdo internacional sobre el clima adoptado en París el 12 de diciembre de 2015 y ratificado por 195 países. El acuerdo entró en vigor el 4 de noviembre de 2016. El objetivo principal del Acuerdo de París es limitar el calentamiento global a muy por debajo de los 2 grados Celsius, y si es posible, a 1,5 grados Celsius, en comparación con los niveles preindustriales. El acuerdo también tiene como objetivo aumentar la capacidad de adaptación a los impactos del cambio climático y proporcionar financiación para apoyar las acciones de mitigación y adaptación.   El acuerdo es legalmente vinculante para las partes que lo ratifican. Las partes deben presentar sus contribuciones nacionales determinadas a nivel nacional (NDC) para reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero. Las contribuciones deben ser revisadas y actualizadas cada cinco años para reflejar los últimos avances científicos y tecnológicos. El acuerdo también establece un marco de transparen

¿Hay deflación en El Salvador?

Si a cualquier persona en la calle se le pregunta cómo está la economía del país, su respuesta suele ser que la economía está mal; ante una segunda pregunta de por qué la economía esta mal, la respuesta suele ser porque todo está más caro. Esta percepción de la economía, puede contrastar notablemente con las cifras económicas oficiales. De acuerdo a los datos de la Oficina de Estadísticas de El Salvador, el Índice de Precios al Consumidor (IPC) para Diciembre de 2015 muestra un crecimiento negativo de 0.1%, dato similar a noviembre del mismo año y, general, a inflaciones muy bajas o negativas en el año 2015, incluso inflaciones muy bajas desde  2014. Con estos datos de inflación surge la pregunta si hay deflación en El Salvador. La deflación hace referencia a una caída generalizada y prolongada de los bienes y servicios contenidos en el Índice Precios al Consumo (IPC). La caída de los precios en un período deflacionario es crónica, generalizada y prolongada en el tiempo.

Mensajes porfiados

Centro comercial camino a La Libertad. Tarde a punto de extinguir. Un grupo de jóvenes se apelotonan con banderas, tambores, pancartas y ataviados con colores políticos. Estamos en elecciones, me recuerdo. Se me acerca uno, con voz afónica de haber gritado consignas quién saben cuánto tiempo. Es un chico joven, veintitantos le calculo. Moreno, muy delgado y con una vincha en la frente con el nombre del partido político, la cual se la ha puesto al revés y las siglas del partido están patas arriba, lo cual no deja ser irónicamente gracioso. Se acerca y me quiere dar una bandera y unas hojas volantes. Le digo: tenés al revés las letras de tu partido-. Me mira con ojos vacíos y levanta los hombros. Me da los papeles, la bandera no la acepto y busca otra persona.   Una señora está bajando un cochecito de niño y niega cualquier acercamiento, más preocupada de alejar a su pequeño del ruido de aquel lugar. Los tambores, más propios de los carnavales en las playas de Rio, retumban a